El aprovechamiento del recurso energético solar, entendido en el plan normativo brasileño como recurso ambiental, consiste en convertir la energía emitida por el sol en energía térmica o directamente en energía eléctrica (proceso fotovoltaico) observando, como consecuencia, el desempeño de las denominadas plantas solares como actividades económicas destinadas a producir electricidad en beneficio de los consumidores a partir de la energía solar. Así, el aprovechamiento de la energía solar, como actividad económica que utiliza el sol como bien ambiental como fuente primaria, está sujeto a los parámetros normativos constitucionales vinculados a la protección legal del medio natural (Art. 225 de la Constitución) y es cierto que en el plan infraconstitucional obedece el contenido de la Política Nacional de Energía (ley 9478/97) así como la Política Nacional de Medio Ambiente (ley 6938/81). Dado que Brasil tiene un gran potencial para generar energía solar sin explotar en el llamado Cinturón Solar, su uso, como recurso natural / activo ambiental que se caracteriza como fuente de energía, se caracteriza no solo como una opción importante y racional de actividad económica para el beneficio. el desarrollo nacional así como la erradicación de la pobreza, buscando también la reducción de las desigualdades sociales y regionales que existen en el país (Art.3º del CF)