La actual pandemia que sufrimos creará un espacio distinto para las relaciones entre los particulares, pues muchos emprendimientos económicos y urbanos de diverso estilo tendrán que ser traspasados o parcialmente modificados. Al respecto nuestra legislación positiva no se ha adaptado por completo a esta nueva realidad, ni en el ordenamiento paralelo de la emergencia sanitaria, ni tampoco el ordinario aparecen muchas claves de respuesta para aligerar los ejercicios de las correspondientes libertades económicas involucradas en esta nueva problemática. Aunque existe algún atisbo en el régimen actual de licencias de funcionamiento municipal, resulta necesario y urgente la necesidad de adoptar esta posibilidad valedera para otros títulos habilitantes locales de naturaleza real. Este trabajo parte de la transmisión de licencias de funcionamiento permitida recientemente por nuestro Legislador para proponer luego una salida que pueda ser extendida a otros sectores locales, siempre bajo ciertas previsiones y en tanto no se violente la cláusula salvo iure terti.